SALARIOS

Pese a ajustes en las prepagas, se tensa la paritaria de la sanidad

Anoche, y tras varias horas de reunión, la paritaria del gremio de la Sanidad, que discute el aumento salarial de 110.000 enfermeras, empleadas y técnicos de Clínicas y Sanatorios, quedó empantanada.

Mientras los empresarios solicitaban un cuarto intermedio, el gremio convocó a un congreso para decidir si realizará medidas de fuerza.

Lo que trabó el acuerdo no fue la disidencia de los empresarios con el reclamo del gremio enrolado en FATSA (22% más un plus del 15% para los licenciados en Enfermería) a partir del 1º de diciembre.

Los dueños de las Clínicas y Sanatorios plantearon que estaban dispuestos a firmar el convenio, que tiene un básico de $ 1.300, muy retrasado respecto de otros sectores, si quienes reciben sus servicios (las obras sociales, el PAMI y las prepagas) les reconocen los mayores costos salariales y otros incrementos.

Hasta ahora, sólo la medicina privada dio el visto bueno porque las prepagas también anunciaron un ajuste del 24% en el valor de las cuotas que les cobran a sus afiliados.

En cambio, las obras sociales sostienen que sólo podrán financiar un aumento de los servicios de las Clínicas y Sanatorios si el Gobierno ajusta el valor de las cuotas de Salud del 1,5 millón de Monotributistas y Personal Doméstico (hoy de $ 24,44 por mes) y eleva el tope salarial de $ 4.800 sobre el que los empleadores y empleados en relación de dependencia hacen sus aportes al Sistema de Obras Sociales.

Así las cosas, con este convenio salarial se dispara una serie de aumentos en cadena. Y ningún sector de la Salud quiere aceptar los mayores costos de sus prestadores si no tiene garantía de que podrá trasladarlos al precio de sus usuarios.

En el caso de las obras sociales, la decisión está en manos del Gobierno ya que esos ajustes requieren de resoluciones y decretos oficiales. Los estudios técnicos y los borradores de los textos oficiales están listos, pero sólo falta de la decisión política de la Casa de Gobierno.

Si bien acuerda con el pedido de las obras sociales, para FATSA la firma del convenio salarial con el 22% no está supeditada a la resolución de las pujas que plantean los distintos componentes de la Salud. El convenio vence a fin de mes, pero el interés de todos los sectores es tener el convenio firmado con antelación justamente para asegurarse que el traspaso de esos mayores costos entre a regir en diciembre.

En el caso de las prepagas, por una resolución de Comercio Interior, deben avisar a sus afiliados con 30 días de anticipación cualquier aumento. Por eso, a fines de octubre comunicaron que las cuotas aumentarán en promedio un 24% y que habrá nuevos planes, entre ellos, una cobertura médica con franquicia, como rige para ciertas seguros generales. (CLARIN)