Plazos Fijos UVA: BCRA extendió duración mínima a 180 días y desalienta su uso
El Banco Central (BCRA) resolvió duplicar el período mínimo de permanencia establecido para los plazos fijos UVA, así lo dispuso este jueves, tras la reunión de directorio, y, de esta manera lo aumentó de 90 a 180 días (alrededor de seis meses). La medida es un golpe para los ahorristas y un paso más en la licuación de pasivos en pesos que lleva adelante el equipo económico.
La medida se dispuso a través de la Comunicación "A" 7929, de este jueves 28 diciembre, en la que estableció que, “con vigencia para las imposiciones que se capten a partir del día siguiente a la publicación de esta comunicación, en 180 días el plazo mínimo para los Depósitos con opción de cancelación anticipada en Unidades de Valor Adquisitivo ("UVA")".
Recordemos que el pasado 18 de diciembre, el directorio del BCRA decidió bajar la tasa de los plazos fijos tradicionales a 30 días al 110% (Tasa Nominal Anual, TNA) desde el 133% y, de esta manera, el rendimiento mensual de estos instrumentos de ahorro pasó a ser del 9,04%, cuando hasta ese momento, era del 11%. Adicionalmente, señaló que era necesario que "el sistema bancario continúe ofreciendo al público depósitos a plazo fijo ajustables por UVA" y señaló que eso era clave para otorgarle previsibilidad a la disponibilidad de los recursos. Y, en paralelo, decidió eliminar la tasa mínima de precancelación que regía para estos instrumentos.
No obstante, este jueves, parece retroceder en esa medida con la decisión de quitar atractivo al plazo fijo UVA, al alargar el plazo de permanencia mínimo de permanencia aceptado de 90 a 180 días. Así, para el economista Christian Buteler, lo que se hace con esta jugafda es tratar de que la gente no coloque ese tipo de plazos fijos.
"Se alargan los plazos de permanencia mínimos de tres a seis meses, cuando la colocaciones promedio de los ahorristas son a 30 días y muy pocos pasan a 90. Ménosvan a ir a 180. Así, todo parece indicar que lo que se busca es que la gente no coloque sus pesos en los UVA, que, crecieron en diciembre un 50%, lo que, aunque se dio partiendo desde una base muy baja, es un incremento muy rápido", dice el analista a Ámbito.
Plazo fijo UVA: por qué el BCRA decidió la extensión En consecuencia, tal como lo plantea el economista Jorge Neyro en diálogo con Ámbito, se trata de "una medida que apunta a complicar el acceso a la cobertura inflacionaria que dan los plazos fijos ajustados por inflación". Y es que indica que, al extender el plazo de este tipo de depósitos, que hoy son los únicos que cubren contra inflación, desalienta ese tipo de apuestas.
Para el economista Fedrico Zirulnik, del Centro de Estudios Económicos Scalabrini Ortiz, "la decisión del BCRA parece ir en línea con la reticencia de los bancos a ofrecer estos instrumentos a sus clientes como mecanismo de cobertura contra la inflación".
Esto responde, a su vez, a que el plazo fijo UVA rinde inflación +1 y eso hace que sea mucho más atractivo que el tradicional, dado que la tasa nominal anual (TNA) pasó del 133% al 110%, lo que equivale a un 9% mensual. Hasta ahora, el rendimiento era del 11% y los bancos podían colocar los pesos en las Leliq, que cubrían ese interés, pero hoy ya no tienen esa opción.
En consecuencia, la única cobertura efectiva contra inflación que quedaba para ofrecer al ahorrista es el UVA, pero los bancos quedan descalzados a la hora de garantizar la rentabilidad al ahorrista con los bonos y letras que hoy le ofrece el Gobierno como respaldo porque rinden por debajo de la expectativa inflacionaria. En consecuencia, se resistían a ofrecerlo.
Sobre la base de esa información, se puede interpretar que, con la medida de este jueves, de algún modo el BCRA les hace un guiño a los bancos porque, al obligar al ahorrista a colocar sus pesos por seis meses en un plazo fijo UVA, desalienta la demanda de éstos.
El plan del BCRA: desindexar los ahorros en pesos Así, en palabras del analista de F2 Soluciones Financieras, Andrés Reschini, "el objetivo parece ser canalizar la masa de pesos del sistema financiero hacia colocaciones con tasa fija negativa, como las que ofreció el Gobierno en la primera licitación del Tesoro".
En definitiva, lo que se busca es desindexar esos pesos para que no tengan que seguir siendo sostenidos por el BCRA, que es el que termina garantizando los rendimientos que dan los bancos con emisión. "Esto implica canalizar esos fondos hacia deuda licuable, cepo de por medio", sostiene Reschini. En definitiva, se le quita rentabilidad al instrumento y eso licúa los pesos en un contexto inflacionario como el actual.
Tal como plantea Buteler, el Gobierno busca licuar los ahorros en pesos. Señala que la mayoría de los plazos fijos vencen en la segunda quincena de enero y, con esta medida de extender tanto la exigencia de permanencia en un UVA, "muchos no van a tener mucha más alternativa que permanecer en uno tradicional" con una tasa que está muy negativa respecto de una inflación que podría superar el 20% o aceptar ir hacia uno ajustado por inflación pero sin liquidez en el corto y mediano plazo.
"Para el Gobierno, es una manera de secar la plaza de pesos, para que no vayan hacia el dólar en el marco de una búsqueda de la gente de protegerse ante una escalada inflacionaria. Pero, por otro lado, sorprende que la estrategia del BCRA apuntaba a desarrollar el plazo fijo UVA", señala el economista Federico Glustein. Y, en este marco, advierte que, si se acelera la inflación, la extensión de plazos lo que hace es patear una emisión mayor hacia adelante porque están atados a esa variable.
"Eso podría ser un efecto adverso, porque, dado que lo que buscan es desalentar este tipo de colocaciones, ahí, el riesgo latente es que eso podría generar una ida hacia el dólar ante la falta de otro refugio de cobertura, lo que es contraproducente contra la búsqueda de controlar la inflación también", señala.
Fuente: Ambito.com