Se firmó el Decreto del Canje de Bonos

Cristina de Kirchner firmó ayer el decreto que habilita la oferta a los bonistas. Tal como anticipó Ámbito Financiero el martes, a su regreso de Montevideo, la Presidente concluyó con todos los trámites pendientes para concretar la operación. Hoy, funcionarios del Ministerio de Economía viajarán a Nueva York para presentar los lineamientos generales de la transacción ante la Securities and Exchange Commission, la entidad que supervisa mercados en Estados Unidos.

La plaza financiera local estaba a la espera de este paso. En las últimas jornadas, circularon versiones que alertaban sobre una suerte de «arrepentimiento» del Gobierno en concretar el canje. También advertían sobre la intención de empeorar la oferta con una mayor quita a los bonistas. Lo cierto es que ahora la operación deberá ser aprobada por la SEC, trámite que puede llegar a durar entre 20 y 30 días. Por ello, a mediados de enero, la transacción estará en condiciones de lanzarse y darse por concluida a fines de enero o a principios de febrero.

Prospecto definitivo

Los detalles finales de la oferta se conocerán una vez que la SEC apruebe lo que se denomina técnicamente como «shelf registration». Tras ese paso, se presentará el prospecto definitivo y entrará a correr el plazo fijado para aceptación por parte de los bonistas de la oferta de canje de los títulos en default por los nuevos papeles. Ayer, de hecho, Cristina de Kirchner firmó el decreto que habilita la emisión de esos nuevos títulos de deuda. Resta aún definir en el Ministerio de Economía si habrá un tramo especial para grandes inversores y luego uno para pequeños ahorristas o bien se harán esos dos capítulos en forma conjunta.

La decisión política de llevar a cabo esta oferta por el default siempre estuvo presente. Es que, tal como fue diseñado por los bancos Barclays, Deutsche y Citigroup, permite al Gobierno obtener fondos frescos por u$s 1.000 millones como mínimo a través de la emisión de otro nuevo papel. Pero a ello se le sumarán los lanzamientos que se buscan realizar una vez que esté concluido el canje. En ese sentido, desde la Secretaría de Finanzas, a cargo de Hernán Lorenzino, tienen previsto emitir Letras apuntando a captar la liquidez excedente que poseen hoy las principales entidades financieras de la plaza. Para ello deberán competir con los papeles que tiene en circulación el Banco Central y que poseen una estructura similar.

Pero no sólo el Ministerio de Economía está aguardando el cierre de la oferta a bonistas. La misma señal, y quizás con mayor ansiedad, es esperada por la provincia de Buenos Aires. El ministro de Economía bonaerense, Alejandro Arlía, estuvo en las últimas 72 horas tanteando en Nueva York la posibilidad de la emisión de un título de deuda. Pero dejará primero pasar al Gobierno nacional con la oferta de canje; no es por caballerosidad, sino, más bien, por decisión política (y podría decirse también financiera, dado que, tras el canje, el costo de los fondos puede ser menor).

Obviamente, todo esto dependerá de cómo se resuelvan las minicrisis que gatillaron Dubai y Grecia. En realidad, se descuenta que antes de Navidad, quizá como obsequio, ya no se hable de ello. Y si se hablara, es por el multimillonario rescate del FMI. Una caída de Grecia tendría un impacto mucho mayor que el de Lehman Brothers. Y difícilmente se vuelva a cometer el mismo error que hace un año, cuando el mundo financiero entró en debacle.(ÁMBITO WEB)