TRAS CINCO DÍAS DE CONFLICTO
Trabajadores levantan el paro en el Banco Provincia
Tras cinco días de conflicto, los trabajadores del Banco Provincia de la seccional Buenos Aires decidieron suspender el paro que mantenía cerradas las sucursales e impedía que jubilados, pensionados y beneficiarios de planes sociales cobraran sus haberes normalmente.
El levantamiento de la medida de fuerza fue confirmado a LANACION.com por el secretario general de la seccional Buenos Aires del gremio, Luis Angio.
La decisión fue tomada por un plenario de delegados y luego votada por una asamblea general que analizó el compromiso al que ayer habían llegado los empleados en conflicto con el Ministerio de Trabajo.
El eje del conflicto era un proyecto de ley que impulsó en agosto de este año el gobierno de Felipe Solá que modifica el régimen de jubilaciones del Bapro, que todavía preside el designado ministro de Economía Martín Lousteau, y que era fuertemente resistido por los empleados de la entidad.
Anoche, en una reunión en la cartera laboral, los bancarios habían logrado un compromiso del ministro Carlos Tomada de que la iniciativa no sería tratada en la Legislatura provincial.
Sin ley
Puntualmente, el director de Relaciones Laborales de la cartera, Adrián Canetto, les transmitió a los delegados la "voluntad" del gobernador electo Daniel Scioli de dejar sin efecto el polémico proyecto, según relató a este medio Angio.
La seccional Buenos Aires del Bapro, que agrupa a la mayoría de las sucursales del área metropolitana y a algunas del interior provincial. A diferencia de otras seccionales, como la de La Plata, que levantaron la huelga el viernes pasado, los gremialistas de la comisión decidieron seguir con la medida de fuerza hasta que el proyecto de reforma de su sistema jubilatorio fuese retirado de la Legislatura provincial.
El proyecto de Solá
La iniciativa contempla varias modificaciones al sistema jubilatorio de los empleados del Bapro.
Entre ellas, la reducción del porcentaje de haberes, la modificación de la composición del directorio de la caja previsional de la entidad, la modificación del porcentaje de aportes que los trabajadores activos y los propios jubilados deben realizar a la caja y la variación del cómputo de los sueldos sobre los que se calcula el monto de la jubilación. (LA NACIÓN)