El déficit primario creció 196% en lo que va del año
La Administración Pública Nacional (APN) acumuló hasta mayo un déficit primario devengado de $775.379 millones. El dato muestra un explosivo crecimiento de 196,1% en términos reales respecto de igual período del año pasado y refleja así los serios problemas que tiene el Ministerio de Economía por mantener en caja el gasto. Los datos son de la Oficina del Presupuesto del Congreso (OPC), que hace un análisis sobre el devengado de esa parte de las cuentas públicas.
Mientras que en los primeros 5 meses las erogaciones totales crecieron 13,1% hasta los $5,5 billones, los ingresos solo subieron 1,9% hasta los $4,2 billones. Con estos datos, aunque sean referenciales porque no son los del total del Sector Público, se puede explicar por qué Martín Guzmán negoció con el Fondo Monetario Internacional (FMI) una nueva configuración de las metas trimestrales del Programa de Facilidades Extendidas.
La recalibración del acuerdo va a alcanzar a las metas del segundo y el tercer trimestre. El objetivo más duro quedará para el fin de año, para darle más tiempo al Gobierno argentino a que tome las medidas necesarias para encarrilar el frente fiscal y que termine en el 2,5% del PBI como está pautado.
Según informa la OPC, los ingresos totales del Gobierno fueron impulsados por la recaudación de impuestos y la seguridad social, aunque esta vez el problema apareció por el lado de los aportes no tributarios. Éstos cayeron 52% debido a que se agotaron los ingresos del Aporte Solidario, que disminuyó 96%.
Por el lado de los gastos, el Gobierno tuvo erogaciones en jubilaciones por $449.714 millones, con una suba real del 7,7%. Los pagos de Asignaciones Familiares costaron $66.813 millones, con un crecimiento de 17,3%. Los programas como el Potenciar Trabajo, Becas Progresar y políticas alimentarias, sumaron $151.770 millones, lo que implicó un crecimiento del 22% real. Según indica la OPC, ello explica una parte del crecimiento del déficit.
Los subsidios económicos en total se llevaron $150.073 millones, con un crecimiento interanual del 29,8% interanual real, y es lo que explica la otra pata del déficit. Los que corresponden a la energía representaron $118.144 millones, con un avance interanual del 49,5% real. El incremento se explica básicamente por la suba del costo de la energía a nivel global y el retraso en el incremento de las tarifas.
Mientras se discute con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires el traspaso de líneas de colectivos que circulan solo dentro de la Capital Federal y el retiro de subsidios al transporte en la zona metropolitana, los gastos en subsidios de la administración nacional fueron en este rubro de $24.904 millones con un avance real del 13,7%. Evidentemente, gran parte de ello se queda en la Capital y los partidos del Conurbano, y una proporción menor va a las empresas del interior del país.
En tanto, los gastos de personal representaron $112.702 millones, con un incremento del 13,4% interanual. Éstos no incluyen el aumento de salarios pactado en paritarias del 60% que empezó a regir desde el 1ro de junio.
Por Carlos Lamiral
Fuente: Ámbito