El superávit comercial cayó 82% anual y siguió la venta de reservas
La balanza comercial cerró el primer bimestre con un superávit un 82,3% más pequeño que el del mismo período del año pasado. El fuerte salto de las importaciones, que tuvo un nuevo round en febrero, de la mano del atraso cambiario, achicó el positivo mensual a uno de USD227 millones en el segundo mes del año. En lo que va de marzo el BCRA vendió USD307 millones, luego de una nueva jornada negativa de la autoridad monetaria en el mercado oficial, pese al cepo cambiario, a causa de una salida incipiente del carry trade. En la tarde del miércoles el Gobierno logró apurar el trámite para cerrar un acuerdo salvador con el FMI, gracias a la aprobación del DNU en Diputados.
El Indec publicó el informe del Intercambio Comercial Argentino (ICA) correspondiente a febrero. Un detalle es clave: los números del Indec dan cuenta de lo que mostraron los asientos contables, a partir de las declaraciones juradas de Aduana, y no de los dólares efectivamente ingresados por la vía comercial. Es decir, no toma en cuenta las decisiones de endeudamiento comercial, dato que publicará el BCRA a fin de mes.
Otra cuestión es fundamental: la balanza comercial muestra solo el resultado de la compra y venta al exterior de bienes, lo que representa solo una parte de la balanza externa. Los bienes, se supone, deben dejar un margen suficiente de dólares para contrarrestar el rojo crónico de los servicios, que en el verano mostraron un rojo particularmente alto por el atraso cambiario que disparó salidas récord de turistas a países vecinos, y de los pagos de deuda. Ese balance, reflejado en la cuenta corriente cambiaria que publica todos los meses el BCRA, viene en rojo desde junio del año pasado, hace ya ocho meses.
De ahí la relevancia de la baja en el superávit de bienes de febrero y enero. El jefe de Estrategia de Cohen Aliados Financieros, Martín Polo, señaló: “Derrumbe del superávit comercial debido al fuerte aumento de las importaciones que volaron al 42% interanual (55% en cantidades)”. Así, en febrero, con una suba del 42,3% interanual en la importaciones, de la mano del atraso cambiario y la incipiente reactivación económica, y una del 10,1% en la exportaciones, febrero terminó con un superávit comercial de USD227 millones. En la comparación desestacionalizada contra el mes previo, las importaciones subieron otro 8,9%. Llevan tres meses en alza. Desde noviembre acumularon un crecimiento del 21,3%.
En enero, último dato disponible del balance cambiario del BCRA, los bienes habían dejado un pequeño superávit que no logró compensar los rojos de turismo e intereses de la deuda y el rojo de cuenta corriente fue deUSD1.656 millones. Para febrero se espera otro resultado similar, dada la caída en el superávit comercial y el boom de turismo al extranjero. El dato se conocerá a fin de mes.
En lo que va de marzo, el BCRA pasó a tener saldo vendedor de USD307 millones. Este miércoles la autoridad monetaria acumuló cuatro jornadas de fuerte sangría en el mercado oficial y vendió otros USD186 M. Totalizó USD931 M en cuatro jornadas. Las reservas cayeron USD1.057 M en cuatro días hasta los USD27.045 M, nuevo mínimo para lo que va del 2025 y alejándose de los USD28.000 M.
La explicación aparece en la reversión del carry trade, frente al desincentivo que generó la falta de certezas respecto al acuerdo con el FMI y el futuro del crawling peg al 1%, tanto por una potencial falta de dólares para financiar el boom importador como por los rumores no desmentidos por el Gobierno acerca del fin del crawling peg al 1%, a partir de la decisión de mantener en secreto el acuerdo. La aprobación del DNU en diputados fue un pequeño paso hacia el cierre de esa incertidumbre, ya que acelera el trámite para conocer la letra de un potencial acuerdo.
Alivio desde el Congreso y los mercados
Tras un martes de pánico en los mercados, con fuerte deterioro en las principales variables financieras, el miércoles trajo alivio desde varios frentes para el Gobierno. En primera instancia, hubo rebotes generalizados tanto en la Bolsa porteña, que recuperó un 4,5% (y un 5,1% medido en dólares), como en los bonos soberanos, lo que se reflejó en una baja de 10 puntos en un riesgo país que cerró en 777 puntos, como en los dólares financieros, que cayeron 0,6% en el caso del CCL y 1% en el del MEP, y en el dólar futuro. En segunda instancia, el Congreso trajo otra fuente de aire con la aprobación del DNU que autorizó a generar nuevo endeudamiento vía FMI.
Esa segunda noticia todavía no alcanzó para despejar incertidumbres. Todavía no se conoce la letra del acuerdo, que de hecho todavía no se firmó. Será clave conocer el monto de los desembolsos, la fecha de llegada de esos fondos y los condicionamientos que imponga el FMI. Y es que en el mercado ya ganó relevancia la idea de que se interrumpirá el crawling peg del 1% mensual. Esa expectativa despertó a la demanda de divisas en el mercado oficial por el desarme del carry trade de los exportadores. Eso no se corrigió: el BCRA siguió con fuertes ventas.
Fuente: Diario BAE