La apuesta por los inmuebles
La venta de propiedades viene creciendo de forma sostenida desde enero. Durante el primer trimestre del año se labraron un 25% más de escrituras que en ese período de 2009.
El boom comercial en el sector inmobiliario está directamente relacionado con la situación económica. Para los especialistas, la gente vuelca sus ahorros genuinos en ladrillos para resguardarlos y también para ganarle a la inflación.
Se trata de una tendencia de consumo similar a la que vive el mercado automotor desde diciembre. El auge de ventas de viviendas se da incluso a pesar de la reciente suba de precios del metro cuadrado. En zonas de Capital y en algunas capitales del interior los valores se ajustaron un 5%. Los empresarios del sector estiman que a fines de 2010 las propiedades van a costar en dólares hasta un 20% más que ahora.
Las estadísticas evidenciaron el repentino incremento de transacciones inmobiliarias. En el registro porteño de la propiedad, por ejemplo, se notó un repunte comercial en el primer trimestre del año respecto del mismo período anterior.
La comercialización de unidades creció un 19% en enero, un 21% en febrero y más de un 20% en marzo.
El presidente de la Cámara Inmobiliaria (CIA), Néstor Walenten, calculó que el auge de ventas es hasta un 25% mayor en lo que va del año frente a los mismos primeros meses de 2009.
“El ritmo es sostenido. Pero no nos olvidemos que venimos de un año muy malo. Ahora somos muy optimistas en la medida que el Gobierno no nos salga con un martes 13”.
Y agregó: “Hoy la inversión inmobiliaria es la mejor opción para el que tiene dinero ahorrado porque la renta de alquiler oscila entre el 6% y el 10% anual”, dijo Walenten.
Para Carlos Wagner, presidente de la Cámara de la Construcción, la demanda se mantiene firme porque la gente invierte para ganarle a la inflación. “El escenario económico actual estableció las condiciones de este crecimiento inmobiliario”, opinó el directivo.
La escalada de precios en el mercado interno convenció a la gente a inmovilizar sus dólares en una propiedad que cuesta 5% más que en noviembre pasado.
“Los aumentos de precios sostenidos de materiales e insumos de la construcción justifican los ajustes del valor del metro cuadrado, aquí y en la Patagonia”, opinó una desarrolladora inmobiliaria que prefirió no revelar su identidad por temor a recibir un llamado del secretario de Comercio Interior.
La semana pasada, Guillermo Moreno inició una ronda de consultas con grandes empresas para combatir la inflación de los materiales e insumos que demandan las obras del sector más pujante de la economía.
El lunes a la tarde le tocó el turno a Techint, que se vio representada por David Uriburu, director del grupo. Entre martes y miércoles pasaron por el despacho del polémico funcionario representantes de siderúrgicas, firmas fabricantes de plástico y de vidrios. Después llegó el turno a la cementera Loma Negra, la más importante del país.
Rodrigo Fernández Prieto, director comercial de la desarrolladora Fernández Prieto y Asociados, elogió la medida con la que el secretario de Comercio intenta frenar la inflación.
“Veo óptima la postura de Moreno. Si no fuera por él el acero, el hormigón y el cemento se hubieran disparo hace rato. Hizo mucho por nuestro sector en estos años. Es cierto que todavía vemos ajustes permanentes de los materiales y que esos aumentos se trasladan al precio de las propiedades. Este año el m2 va a costar entre un 4% y un 8% más, según la zona”, estimó el empresario.
A Fernández Prieto no le preocupa la inflación en el sector justamente porque desde que comenzó el año los niveles de ventas se dispararon. “Sorprendieron las transacciones de enero y febrero. Este movimiento no se daba desde los últimos ocho años”, dijo el íntimo amigo del hijo de Julio De Vido.
Alan Faena, quien prometió ayer que para fines de octubre tendrá listo el centro cultural Los Molinos, en el corazón de Puerto Madero, coincidió con su colega. “Estoy de acuerdo con que Moreno frene la inflación, porque uno planifica una inversión inicial en el comienzo de la obra y termina poniendo bastante más. De todas formas eso no desalentó las ventas. Los departamentos en Los Molinos están todos vendidos”, contó el excéntrico desarrollador inmobiliario. (CRITICA DIGITAL)