La caída de la recaudación bonaerense se desaceleró en agosto
La recaudación de la provincia de Buenos Aires mostró en agosto un descenso interanual de 10,3%. A pesar de la baja, el número deja un halo de esperanza, ya que confirma e incluso profundiza la desaceleración en la caída que se había visto en julio.
En términos nominales, es decir sin ajuste por inflación, los ingresos tributarios bonaerenses crecieron 26,1% el mes pasado, al alcanzar los $38.827 millones
Desde ARBA indicaron: "En el segundo trimestre de este año, plenamente afectado por la crisis económica generada por la pandemia, la recaudación real alcanzó el mayor descenso de la serie analizada. El desempeño de los meses siguientes sugiere que comenzó un proceso de recuperación de la recaudación provincial medida en términos reales".
El desempeño en agosto de los impuestos a los Ingresos Brutos y Sellos explicaron gran parte de la recuperación.
“El incremento estuvo impulsado principalmente por los impuestos sobre los Ingresos Brutos y Sellos, y es reflejo de la recuperación que comienza a mostrar la economía”, destacó Cristian Girard, director de ARBA.
“Para consolidar ese mayor nivel de actividad económica son fundamentales las políticas activas del Estado, tanto a nivel provincial como nacional, porque el rol del sector público es estratégico a la hora de fomentar la demanda e impulsar el crecimiento. Ese es el objetivo del programa de reactivación que presentó el gobernador Axel Kicillof para potenciar el desarrollo productivo bonaerense y proyectar un horizonte más allá de la pandemia”, agregó el funcionario.
La recaudación del impuesto sobre los Ingresos Brutos creció un 29,7% nominal en la comparación con el mismo mes de 2019 pero cayó 7,8% real.
"La crisis sanitaria profundizó la contracción del nivel de actividad que venía observándose a raíz de la crisis económica preexistente. Sin embargo, la retracción de la recaudación de Ingresos Brutos medida en términos reales se desaceleró notablemente durante los dos últimos meses", indicaron desde ARBA.
El impuesto de Sellos tuvo un aumento nominal de 34,3% medido en términos interanuales, impulsado principalmente por la recuperación de la actividad de los Registros Seccionales Automotores (patentamientos de 0km y transferencias de vehículos), aunque con una baja base de comparación interanual producto del diferimiento en el pago de sellos sobre 0km que operó el año pasado.
La recaudación de este impuesto también fue impulsada por el régimen de Tarjetas de Compra, que registró una expansión interanual de 58,6% en agosto, producto del creciente uso de tarjetas de crédito como medio de pago fomentado por la situación de aislamiento social.
Por el Impuesto a los Automotores y Embarcaciones Deportivas se recaudaron en agosto $1.439 millones, que implican una caída de 7,7%. En tanto que todas las plantas del Inmobiliario sumaron $3.236 millones, con una suba de 35,6% respecto de 2019. Los planes de pago totalizaron $607 millones y otros ingresos tributarios aportaron $50 millones.
Nuevamente en agosto se observó una caída en el nivel de cobrabilidad de los impuestos patrimoniales respecto de 2019, que fue más pronunciada en el caso del inmobiliario urbano (edificado y baldío) y del impuesto a las embarcaciones, mientras que es menos significativa para el impuesto a los automotores y el inmobiliario rural.
Fuente: BAE Negocios