La venta de combustibles lleva 15 meses de caída

La venta de combustibles líquidos alcanzó en febrero un volumen total de 1.309,5 millones de litros, un 3,96% menos que en el mismo mes de 2024, con lo que se completaron quince meses consecutivos de caídas interanuales en los registros, de acuerdo con los datos aportados por la Secretaría de Energía.

La baja porcentual no es la menor de la Presidencia de Javier Milei -en enero el descenso fue de 3,02%- pero es el mejor desempeño si se toma como base de comparación en promedio diario de ventas (en 2024 febrero fue bisiesto), en cuyo caso la retracción fue de 0,53%.

Algunas señales positivas Sin mostrar aún variaciones positivas, la disminución de las bajas interanuales hacen prever entre los analistas del sector que marzo podría ser el primer mes con crecimiento en las ventas, en especial por una atenuación en los incrementos por la suspensión de los incrementos de los impuestos a los combustibles y un menor ajuste del dólar oficial, ya que desde febrero el crawling peg se redujo del 2% al 1%.

En ese sentido, la mitad de los 24 distritos tuvo incrementos respecto de febrero de 2024, en un listado encabezado por Formosa (6,76%), en gran medida por la baja base de comparación, ya que se trata de la provincia que mostró en 2024 los descensos interanuales más pronunciados.

Por el contrario, entre las jurisdicciones con mayores retrocesos estuvieron Tucumán (-12,.03%), la Ciudad de Buenos Aires (-9,68%) y Río Negro (-7,64%).

Sin llegar a una mejora interanual, la recuperación de febrero se sustentó en el desempeño de los combustibles premium, que cerraron el mes con un alza del 8,39%, a diferencia de los standard, que mostraron una baja del 8,74%.

El mercado de combustibles Las ventas de naftas y gasoil de los últimos años no puede ser analizada sin tener en cuenta el impacto del componente impositivo, el tipo de cambio y los problemas de abastecimiento suscitados a mediados de 2022, que obligó al presidente de entonces, Alberto Fernández, a modificar los porcentajes de mezcla del biodiésel.

En lo referente a la carga tributaria, se aplican los impuestos a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, que se deben ajustar con periodicidad trimestral según la inflación, con incidencia dispar según tipo de combustible, marca y región por tratarse de sumas fijas.

Al respecto, ambos gravámenes estuvieron congelados durante 2022 y 2023, pero en la gestión de Milei se comenzaron a compensar esos atrasos en un proceso que aún no se completó, a fin de evitar un mayor impacto inflacionario.

Por tal razón, tanto en febrero como en marzo esos ajustes volvieron a postergarse, generando un mayor problema, ya que si no se modifican o derogan los impuestos, esos ajustes no aplicados en la actualidad implican incrementos mayores futuros.

Por otra parte, un estudio de la consultora Montamat y Asociados destacó que los precios de los combustibles en la Argentina está cada vez más alineados con los internacionales, “no porque hayamos hecho grandes esfuerzos para internacionalizar los precios internos, sino porque los valores globales han bajado y se han acercado a los nuestros“.

Fuente: Diario BAE