ECONOMÍA

Moreno da luz verde a importaciones de indumentaria y de autopartes

En medio de la polémica por las trabas a la importación de alimentos que también se producen en el país el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, comenzó a dar luz verde al ingreso de bienes e insumos que entran bajo el régimen de licencias no automáticas. Así lo confirmaron desde distintos sectores del mapa empresario doméstico, desde autopartistas hasta productores de indumentaria y calzado. También otras empresas importadoras que pidieron confidencialidad.

Moreno, sin embargo, mantiene su advertencia de principio de año: sólo deja importar a quienes tienen producción local y un saldo exportador favorable. Los importadores netos, en cambio, tienen prácticamente vedado el ingreso de productos.

En el sector empresario no saben cuánto durará esa ‘buena voluntad’ del funcionario con respecto a los productos extranjeros, dado que sus decisiones con respecto a ese punto van de la mano de la balanza comercial. Y les preocupa que en el primer trimestre, de acuerdo con datos del Indec, el superávit comercial –exportaciones menos importaciones– llegó a los u$s 2.133 millones de dólares, un 41% menos que los u$s 3.605 millones del mismo período de 2009, cuando todavía pesaban sobre la economía los efectos de la crisis financiera internacional.

De todas formas, celebran la decisión oficial, más aún cuando comparan la situación actual con lo que ocurrió en 2008 y 2009, cuando la falta de insumos extranjeros debido a la demora en la entrega de licencias para importar estuvo a punto de frenar la producción, por ejemplo, de las automotrices instaladas en la Argentina.

Los casos

“Tuvimos el último contacto con Moreno hace 10 días para presentarle nuestro plan de exportaciones. En nuestro caso, no hubo inconvenientes y a partir de ese encuentro tuvimos luz verde para importar”, explicó el timonel de una autopartista internacional con producción local que trae algunos productos del exterior.

Fabricantes de indumentaria, en tanto, confirmaron que “este año no tenemos problemas con las licencias para importar”. Esa empresa, que pidió reserva, utilizó un argumento que sedujo Moreno: aumentó su producción local en los últimos años y evalúa instalar una nueva planta en el país.

Allegados a la Cámara de Importadores de la República Argentina (CIRA) confirmaron también la política más flexible del funcionario, que entabló una dura disputa con el sector en los últimos dos años. Para ganarse su simpatía, las empresas le llevan sus números de producción en el país. Allí, intentan demostrarle que según su propio saldo comercial exportan más de lo que importan.

Todos los que lograron sin sobresaltos autorizaciones de Moreno este año marcan una diferencia con respecto al caso de los alimentos: las importaciones que entran bajo el régimen de licencias no automáticas preocupan a Moreno por su interés de defender el saldo comercial para conservar dólares. En cambio, aseguran que las trabas a la importación de alimentos, cuyo ingreso comenzó a normalizarse el miércoles, se debe a su intención de proteger la oferta local. (El Cronista)