Suba de tasas: sin mirada unánime, el mercado espera hoy la decisión del BCRA
El revuelo que se vivió en las últimas dos semanas en el mercado de deuda en pesos dejó a los analistas sin conclusiones unánimes. La licitación de esta semana, que prometía empezar a ordenar el panorama en base a las señales de tasa de interés que convalidara el Tesoro, tampoco brindó demasiadas pistas de lo que viene hacia adelante. Más bien pareció ratificar el mismo rumbo “gradualista” en el manejo de los rendimientos reconocidos al mercado. En ese contexto, distintos analistas de la city esperan la suba de la tasa de interés que decidirá hoy el directorio del Banco Central, aunque no hay coincidencia en las lecturas de qué impacto pueden tener en la compleja situación financiera que atraviesa el Gobierno.
Respecto de la licitación del martes, desde Portfolio Personal se estimó que “las tasas de colocación a simple vista parecen por debajo de lo que ofrecían estos títulos en el mercado secundario”, ya que “las Lecer a octubre y diciembre fueron colocadas al 2,02% y 3,01%, respectivamente, lo cual es alrededor de 120 y 75 puntos básicos por debajo del mercado”.
En esta línea, la consulta PxQ, que dirige el exviceministro de Economía Emmanuel Álvarez Agis, publicó un informe que asegura que “la licitación, aunque reducida en magnitud, mostró nuevamente que el equipo económico tarda en responder y coordinar, y parece tener tiempos no compatibles con el nivel de riesgo actual”. “La curva de letras CER, que hasta hace una semana rendía negativo hasta enero de 2023, hoy solo muestra rendimientos negativos en los papeles a junio y julio de 2022, y esto como consecuencia de la intervención del BCRA”, señaló.
Las miradas, entonces, estarán puestas en la decisión del Central. La disputa entre distintos sectores del gobierno por el esquema de tasas de interés viene desde hace tiempo. Mientras desde el Ministerio de Economía son más propensos a retacear subas, algunos miembros del BCRA insisten en la necesidad de dar señales algo más agresivas. Hasta ahora, se impuso el ministro Martín Guzmán. Las discusiones del mercado sobre el eventual ajuste que haga el Central le ponen un piso de 200 puntos básicos a la corrección.
Santiago López Alfaro, presidente y socio de Patente Valores, estimó en diálogo con Ámbito que, si el Central retoca 200 puntos y deja la TNA de las Leliq en 51%, eso es consistente con una tasa efectiva de 65%. De avanzar en ese sentido, el Banco Central no cambiaría la estrategia más conservadora de modificación de tasas implementada a lo largo del año. Otros analistas consideraban que la tasa break even entre la Leliq y la Lede larga se ubica en torno de los 350 puntos básicos.
¿Qué importancia tiene la tasa? Miguel Kiguel, director de Econviews, le dijo a Ámbito que la señal de la tasa “es muy importante” por dos razones: “Primero, porque es el único instrumento efectivo que tiene el Central para pelear con la inflación. Y segundo porque ayuda a controlar un poco el tipo de cambio, haciendo los pesos más tentadores”. “De todas formas, es un momento difícil por la falta de confianza, pero seguramente sería un buen comienzo que el Banco Central tenga una actitud más agresiva que la que tuvo hasta ahora, donde las subas fueron entre 200 y 250 puntos básicos”, agregó.
Federico Furiase y Martín Vauthier, de Anker Latinoamérica, suman una señal respecto del esquema de tasas que debe dar el Gobierno para que sirva a la descompresión de la cuestión cambiaria. De acuerdo a su lectura, la tasa de interés en pesos debería ubicarse por encima del ritmo del crawling peg. De esta manera, se premiarían los depósitos en pesos y se desalentaría el desequilibrio cambiario que estimula mayores importaciones y desalienta las exportaciones, una cuenta que también desgasta la acumulación de reservas. En mayo, el ritmo de devaluación viajó al 4,1% mensual y saltó al 4,3% en lo que va de junio.
El riesgo que ven algunos analistas si el Central convalida una suba muy fuerte es que el mercado, sobre todo los bancos, quiera cambiar el “riesgo Tesoro” por “riesgo BCRA”. Eso implicaría el desarme de posiciones en deuda y un vuelco de esos fondos a money market.
En el Gobierno, mientras tanto, algunos funcionarios admiten que el esquema de tasas puede ser un tema fuerte en las próximas negociaciones con el Fondo Monetario Internacional, que exigió rendimientos positivos en términos reales.
Más allá de la señal de la tasa, en la city sí había una coincidencia: miran el gasto fiscal y lo señalan como la causa de los problemas.
Por Estefanía Pozzo
Fuente: Ámbito